DE OLVIDO

Olvida todo lo anterior... porque a parte de eso y de lo que no se sabe...

podría prepararte la cena... que recrea  y enamora... ay Juan... Juan de la Cruz... qué has hecho que pasas por mi cuarto calentando mi cama... con tus versos del alma... y esos éxtasis que para mi quisiera.

Isa... si me dejas, te daré mi gran beso con lengua incluída... se liberarán tus piernas de seda... Oh mi beso. Que transcienden todos los besos que has de vivir. 

¿Olvidar?

No es acaso la seda la tela de los guerreros

La que resiste todos los embates de la espada

La que cubre después la espalda desnuda

tras el ágape de tu boca

Qué haré yo ahora que el guante yace frente a mis pies descalzos,

prestos para el airoso rondó

de tu elegancia

©Isabel Mendieta Rodríguez y Adsuara Guillermo Gil 

Imagen: Nasser Zalloum

POR AHORA

Ahora si...

ya es hora de escupir el hueso y proseguir,

ya es hora de meterme en el saco y a morir.

Ya tengo la frente reventada y el alma oscura.

En mis ojos viven todos tus misterios.

De mi boca salen tumbas y diablos.

De mi alma no se sabe nada... nada. 

¿ A dónde fui a parar.. ?    

..A los brazos de los que nunca debiste huir,

Al nido que en el almendro fabricamos

Cierra tus ojos, 

son guías en la noche;

Nos dirigen al instante 

en el que comulga tu frente y la mía

Convertidos en la imagen 

que aprendimos a adorar

como fuga de Bach a cuatro manos

Ahora sí..

Ahora, eres mío

©Isabel Mendieta Rodríguez y Adsuara Guillermo Gil 

TRES ROMBOS

TRES ROMBOS

Los cuadros de la bata se descuelgan

Juegan a tres rombos sin feudo despejado

¿Y si nos escribimos ahora 

que están soterradas las vías 

y circula libre tu acción?

Isabel Mendieta Rodríguez

Derechos Registrados

Imagen: Román Zasnolov

DE AQUELLA PROMESA

Chorrea la luna.

Prometer algo tan serio:

Una historia emergente

en la campaña de miradas

cargada de matices 

al encuentro de la paz.

Todo se asienta,

reposa cada ficha en la siguiente

cuando el serpentín se activa

y reconduce las aguas.

Somos uno y nuestros recuerdos

crecientes,  según se descuelgan

de la esfera celeste que orbita

del pasado

a nuestro lejano presente

Apareces con cada rayo 

en los rincones que no sospechas

como trepa hasta la garganta

tu ausencia

Isabel Mendieta Rodríguez

Derechos Registrados

 Imagen: en la red

CLICK

CLICK

¿Te hace gracia?

Sí, parece...

Seguiré con mis links

y otros clics,

no de playmobil,

torpes en el arte de jugar

al escondite.

Sigo, ya ves...

¡Es my birthday!

Sólo tengo que entonar una canción

para que mis pies se lancen 

en la resbaladiza pista,

sin otro guía que la intuición 

y los rescoldos de este amor

que aún abrasan,

cuando no respiran

Te hace gracia

que sea lunes por la tarde

después de tantas lunas sin río,

sin nuestras voces

sin las sirenas que alerten

del peligro del silencio y su tormenta

Es gracioso, lo sé.

Tanto....

que no me río 

                  Click.          Off

Isabel Mendieta Rodríguez

Derechos Registrados

VERDE Y AZUL

VERDE Y AZUL

¿Verde o azul?

Sereno sonajero

en compás de paso al agua,

y al oxigeno de tu pradera

inmensa en la que naufragar,

tomar un respiro

y nadar sin corriente

pero tan sofisticado

que no hay nada helado

al otro lado quisiera cruzar

y en el lago

volverme a preguntar:

¿Verde o azul? 

Pues quiero la calidez

de los colores fríos;

la mixtura de una flora

con mil razas de peces

cortando el viento

en ondas y voces

desde la simetría de nuestro horizonte,

eje de otro espacio igual…

¡qué ya no recuerdo!,

si era verde

el azul de mar

Isabel Mendieta Rodríguez

Derechos Registrados

DE INVENTOS

DE INVENTOS

Podría inventar las sombras de un baile…

Entrar en la inercia del palacio

y escuchar esa voz tan familiar

que danza sobre los candiles.

Observar el cuadro en el que no posamos;

Un retrato fiel construido de versos,

para dejar constancia de nuestra letanía

con la que viajo por etapas

en la fina piel de la palabra.

Cometería el desliz de besarte

de conocer la inquietud de una noche fatal

con uvas por comandantes,

ordenando a la boca que las siga,

y recuperar el paso entre los muros

que si bien vigilan,

no muestran la plenitud

de nuestra atracción.

Podría inventar la memoria

de una ausencia de experiencia

como nutriente del amor que crece

mientras pasan los trenes

por los remotos lugares de la posibilidad

Isabel Mendieta Rodríguez

Derechos Registrados